Se comenzó a ejecutar una serie de tareas de señalización con carteles y demarcación de sendas peatonales para el funcionamiento de una ciclovía en la vía principal de circulación del área “Selva Iryapú” en Puerto Iguazú. La nueva infraestructura constará de un camino para vehículos de motor a lo largo de los 9 kilómetros existentes y un sendero destinado a peatones y ciclousuarios debidamente sectorizado y demarcado para separar la circulación. Los trabajos son ejecutados por la Dirección Provincial de Vialidad, (DPV) y en estos días se trabaja en el primer tramo, ya que el proyecto se desarrollará en etapas.
Punto de partida
A partir de una problemática con la velocidad de circulación se trabajó en un proyecto vial que genere soluciones y dote de seguridad a la vía principal que tiene la zona denominada Selva Iryapú, conocida también como 600 Hectáreas. Era necesario generar espacios para que automovilistas, ciclistas, motociclistas y peatones puedan transitar de forma segura dentro del área, un sector explotado bajo concepto de espacio preservado y donde funcionan establecimientos turísticos sustentables y están asentadas comunidades de pueblos originarios.
El proyecto, que fue presentado a fines del año 2022, se sometió a un estudio técnico entre las partes involucradas, por un lado, los integrantes de la Fundación Selva Iryapú, el municipio de Puerto Iguazú y el Gobierno de Misiones a través de la Dirección Provincial de Vialidad, como así también el Ministerio de Turismo. El trabajo minucioso permitió analizar las diferentes alternativas para llegar a acuerdos que permitan ordenar el tránsito, generar más seguridad y agilidad a los usuarios. Por el sector, a diario, circulan turistas y vecinos de la ciudad de Iguazú que trabajan en los distintos hoteles.
Principales cambios
La circulación estará habilitada en la calzada principal para automóviles y motocicletas. Por otro lado, la ciclovía contará con doble mano de circulación y, por el bajo tránsito, también se permitirá compartir ese espacio por peatones. Además, se van a sumar sendas peatonales que van a delimitar los lugares de cruce más seguro y advertir a los automovilistas para que cedan el paso.
La zona de las “600 Hectáreas” se basa en la sustentabilidad ambiental como premisa, se busca una convivencia respetuosa con la biodiversidad y preservar el entorno. Por ello, es necesario acatar la velocidad de circulación de 30 kilómetros por hora como máximo. Por otro lado, se señalizarán con colores y nombres de pájaros autóctonos los distintos caminos internos, con numeración progresiva para poder generar un sistema de localización para los establecimientos allí emplazados.