Este órgano tiene funciones esenciales para el bienestar del cuerpo, como eliminar toxinas, producir proteínas y almacenar energía.
También cuenta con una asombrosa capacidad de regenerarse y retomar su función depurativa cuando se deja de beber a tiempo.
El consumo excesivo de bebidas alcohólicas puede causar enfermedades como hígado graso, fibrosis y cirrosis hepática.
Recordá que una ingesta responsable es clave para cuidar de tu salud y prevenir patologías graves.