La prevención y el tratamiento del dengue requieren un enfoque integral. En primer lugar, es fundamental mantener la limpieza del patio y eliminar posibles criaderos de mosquitos.
Esto ayuda a reducir la proliferación del vector transmisor de la enfermedad.
Además, es importante recibir la vacunación y mantener una alimentación equilibrada, rica en nutrientes como hierro, vitamina C y vitamina A. Asimismo, se recomienda una adecuada hidratación, descanso y una alimentación saludable, así como el uso de medicamentos bajo supervisión médica. Estos cuidados extras son esenciales para superar la enfermedad de manera efectiva.